Un nuevo análisis realizado por Hub reveló que los espectadores que aseguran no tolerar la publicidad se están convirtiendo en una audiencia relevante para las plataformas de video y los anunciantes.
Durante más de tres años, Hub ha monitoreado en su estudio semestral TV Advertising: Fact vs. Fiction que la mayoría de los espectadores aceptan la publicidad si eso les permite ahorrar dinero en sus suscripciones. Además, con el tiempo, el grupo que afirma no soportar los anuncios ha disminuido.
En diciembre de 2022, solo el 26 por ciento de los espectadores que decían no tolerar anuncios estaban abiertos a opciones con publicidad. Actualmente, ese porcentaje se acerca al 40 por ciento.
Los datos señalaron que estos autodenominados “odiadores de la publicidad” tienen ciertas características: Ven menos televisión. En promedio, 17,5 horas semanales, 2,5 horas menos que el grupo que considera que “el contenido es lo más importante” y 1,7 horas menos que los que dicen tolerar algunos anuncios. El 39 por ciento de este grupo tiene entre 18 y 34 años. Aunque los espectadores jóvenes suelen consumir más contenidos en FAST, entre los que rechazan la publicidad solo el 54 por ciento afirma ver estos servicios, frente al 65 por ciento del grupo centrado en el contenido y el 62 por ciento de los que toleran anuncios.
El reporte informó que estos espectadores consumen tanto contenido con publicidad como sin ella. Casi todos los televidentes, independientemente de su tolerancia a los anuncios, ven algo de programación con publicidad, especialmente deportes, noticias y SVOD. Sorprendentemente, casi un tercio de los “ad intolerants” ven únicamente televisión con publicidad.
Además, consideran que la cantidad de anuncios es excesiva, pero aun así les prestan atención. Este grupo es el más propenso a decir que los cortes publicitarios reducen su experiencia de visualización, pero también declaran que prestan atención a la mayoría de los anuncios y promociones que ven.
Hub informó que este grupo valora los anuncios más positivamente de lo esperado, calificando mejor los anuncios que aquellos que toleran algunos anuncios. Son más proclives a coincidir en que los anuncios son de marcas de calidad, que resultan interesantes y que les ayudan a decidir qué comprar.
Entre tanto, se muestran menos receptivos ante innovaciones publicitarias. Este grupo es menos propenso a prestar más atención a anuncios interactivos, personalizados o cortes con un solo anuncio. Algunas innovaciones, como los cortes más breves, incluso generan menor atención, posiblemente porque implican interrupciones más frecuentes.
El estudio concluye que, aunque los “odiadores de la publicidad” ven menos televisión y no disfrutan de la experiencia publicitaria, prestan atención y consideran útiles los anuncios que ven. A medida que suben los precios de las suscripciones, incluso estos espectadores están optando por planes con publicidad para ahorrar dinero. Esto representa un desafío y una oportunidad tanto para las plataformas de streaming como para los anunciantes.